Isaac Fernández/DESNIVEL
A punto de cumplir 33 años, Berta Martín es ya una veterana en el circuito de la escalada deportiva nacional. Es toda una referencia y se acaba de proclamar campeona de España de Búlder por quinta vez tras haberse estrenado en Silleda 2001 y haber repetido en Avilés 2005, Motril 2006 y Barcelona 2009.
En el idílico y céntrico emplazamiento del Moll de la Fusta de la capital catalana, Berta ha reinado por segundo año consecutivo, demostrando que su motivación y buen hacer no entiende de edad ni de maternidad. Además, con diez años de competiciones a sus espaldas, relativiza con tranquilidad los resultados, buenos y malos, que le puedan llegar. No dejará de llevar la tranquila vida de una fanática escaladora en el pueblo de Sant Martí deTous, en pleno centro de Cataluña.
¿Cuál es tu objetivo al venir al Campeoanto de España de Búlder?
El bloque se me da mejor que las vías y me motiva venir a ganar. La idea es ganar, después de tres victorias y un montón de podios desde hace diez años.
¿Cómo ves el montaje de Top30 de este año aquí en Barcelona?
Está todo perfecto, la organización, la infraestructura, la localización, un diez. Este año ha mejorado respecto al anterior. Se nota que la organización se ha fijado en los puntos débiles del año anterior y los han solucionado.
Ha habido un importante cambio en los equipadores, ¿has notado esa diferencia?
La verdad es que yo me enfrento siempre a lo que me pongan delante. Me fijo en el problema en sí e intento realizarlo de la mejor manera, sin fijarme en quién lo ha equipado ni tampoco en el estilo que tiene.
¿Y a nivel de participación?
Creo que a las competiciones de bloque viene más gente y es más motivante porque escalas más. A nosotros nos gusta escalar y valoras que puedes estar escalando casi una hora, a diferencia de las competiciones de dificultad que te puedes quedar fuera casi sin haber escalado nada. El nivel femenino está muy bien, también, aunque como los bloques de la clasificatoria eran muy fáciles, es difícil de valorar.
Actualmente, ¿por qué momento pasas? ¿Qué estás haciendo en cuanto a la escalada?
Son momentos de cambios para mí, pero no sé en qué dirección. Escalo todo lo que puedo. Últimamente ha hecho bastante mal tiempo, pero intento salir a escalar en roca todos los fines de semana, contra viento y marea.
Supongo que el hecho de ser madre influye en tus posibilidades de escalar…
Influye en pequeñas cosas, es cierto, pero intento que mi hija Geila se adapte a nuestro ritmo lo máximo posible. Todo lo que se puede adaptar una niña de dos años, claro.
¿Por dónde acostumbras a moverte a nivel de escalada?
Sobre todo vamos mucho a Santa Linya, porque es muy cómodo para la niña. En cuanto a las vías, escalo el máximo grado que puedo, eligiendo las líneas un poco sobre la marcha, sin planificaciones. En este sentido, mi grado máximo es 8b y trabajo básicamente vías de este grado. No suelo escalar mucho búlder en roca, me gusta más la cuerda.
¿Planificas tus entrenamientos?
Planificamos junto con David Macià la temporada entera, según las perspectivas y los objetivos que nos marcamos.
¿Qué objetivos tienes para esta temporada?
La verdad es que estos objetivos fluctúan, según cómo me encuentre y las cuestiones personales.
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