Juanma Bellón/AS
(Foto: Felipe Sevillano)
¿Qué valoración hace de este año 2009 que acaba de terminar?
Ha sido el mejor de mi carrera. He quedado campeona del mundo y he podido entrenar muy bien sin ningún problema de lesiones.
¿Cómo empezó en el mundo del atletismo?
Un poco de casualidad. Cuando tenía nueve años, mi hermana y yo bajábamos a jugar al fútbol con los vecinos. Algunos de ellos hacían atletismo en el club de Venta de Baños y yo fui a algunas carreras. Me enganché a este deporte en el que compites, conoces a mucha gente, viajas...
¿Cuándo se dio cuenta de que iba a ser buena?
Al principio competía y no sabía muy bien dónde iba a llegar. Pero a los 14 años ya fui campeona de España. Y con 17 quedé campeona de Europa júnior de 1.500 en San Sebastián. Fue muy emotivo. Además, a partir de ahí empezaron a llegar los sponsors y las ayudas de la Federación.
¿Recuérdenos la historia de su cinta?
(Risas) Me gustaba mucho el tenis y en los años 80 las estrellas españolas eran Sergio Casal y Emilio Sánchez Vicario que competían con muñequeras y cinta. Mis tíos me regalaron la cinta rosa y desde el año 85 la llevó. Ha sido la misma hasta 2006 que con mi marca de ropa hicimos una que se podía comprar con fines solidarios.
¿Cómo es entrenarse en invierno en Palencia?
Dicen que de Palencia salen buenos atletas por el tipo de personas que somos. El frío del invierno es muy duro y a mí me gustan los climas cálidos. Pero aquí tengo a mis compañeros de entrenamiento (Silvano, Edu y Diego) que me ayudan todos los días. Prefiero pasar frío si es para entrenarme con ellos.
¿De quién se acuerda cuando consigue todos sus logros?
Mis logros no los consigo sola. Soy la cabeza visible pero detrás hay mucha gente que me ayuda como mi familia, amigos, manager...
¿Un mal momento en su carrera?
En el año 2004 antes de los Juegos de Atenas. Tenía una lesión que los médicos no lograban detectarme y me entrenaba con muchos problemas. A falta de un mes para los Juegos me dijeron que tenía roto el tendón y que no podría ir a esta cita. Cuando ya supe el diagnóstico me centré en recuperarme y mirar hacia adelante.
Tras esa ausencia y la caída de Pekín, ¿piensa en los Juegos de Londres 2012?
Sin duda. Entreno cada día con el objetivo de llegar a los Juegos de Londres. Es mi gran motivación.
Pero antes están los Europeos de Barcelona este año 2010, ¿estará allí?
Sí. Me gusta planificar con tiempo. Los Europeos son el objetivo de esta temporada.
¿Cómo fue el paso al 3.000 obstáculos?
Era la distancia que más me gustaba desde siempre. Vi además que ya había cumplido mis etapas en el 1.500 y el 5.000. También probé el 10.000 y no me gustó nada.
¿Un deseo para 2010?
Salud para mí y para los míos. Es lo más importante.
¿Y para el mundo?
Yo siempre estoy en contra de las guerras y a favor de la solidaridad, sobre todo con la gente más cercana a nosotros.
Después de su carrera deportiva le gustaría...
Quedarme en Palencia a trabajar.
¿Qué valoración hace de este año 2009 que acaba de terminar?
Ha sido el mejor de mi carrera. He quedado campeona del mundo y he podido entrenar muy bien sin ningún problema de lesiones.
¿Cómo empezó en el mundo del atletismo?
Un poco de casualidad. Cuando tenía nueve años, mi hermana y yo bajábamos a jugar al fútbol con los vecinos. Algunos de ellos hacían atletismo en el club de Venta de Baños y yo fui a algunas carreras. Me enganché a este deporte en el que compites, conoces a mucha gente, viajas...
¿Cuándo se dio cuenta de que iba a ser buena?
Al principio competía y no sabía muy bien dónde iba a llegar. Pero a los 14 años ya fui campeona de España. Y con 17 quedé campeona de Europa júnior de 1.500 en San Sebastián. Fue muy emotivo. Además, a partir de ahí empezaron a llegar los sponsors y las ayudas de la Federación.
¿Recuérdenos la historia de su cinta?
(Risas) Me gustaba mucho el tenis y en los años 80 las estrellas españolas eran Sergio Casal y Emilio Sánchez Vicario que competían con muñequeras y cinta. Mis tíos me regalaron la cinta rosa y desde el año 85 la llevó. Ha sido la misma hasta 2006 que con mi marca de ropa hicimos una que se podía comprar con fines solidarios.
¿Cómo es entrenarse en invierno en Palencia?
Dicen que de Palencia salen buenos atletas por el tipo de personas que somos. El frío del invierno es muy duro y a mí me gustan los climas cálidos. Pero aquí tengo a mis compañeros de entrenamiento (Silvano, Edu y Diego) que me ayudan todos los días. Prefiero pasar frío si es para entrenarme con ellos.
¿De quién se acuerda cuando consigue todos sus logros?
Mis logros no los consigo sola. Soy la cabeza visible pero detrás hay mucha gente que me ayuda como mi familia, amigos, manager...
¿Un mal momento en su carrera?
En el año 2004 antes de los Juegos de Atenas. Tenía una lesión que los médicos no lograban detectarme y me entrenaba con muchos problemas. A falta de un mes para los Juegos me dijeron que tenía roto el tendón y que no podría ir a esta cita. Cuando ya supe el diagnóstico me centré en recuperarme y mirar hacia adelante.
Tras esa ausencia y la caída de Pekín, ¿piensa en los Juegos de Londres 2012?
Sin duda. Entreno cada día con el objetivo de llegar a los Juegos de Londres. Es mi gran motivación.
Pero antes están los Europeos de Barcelona este año 2010, ¿estará allí?
Sí. Me gusta planificar con tiempo. Los Europeos son el objetivo de esta temporada.
¿Cómo fue el paso al 3.000 obstáculos?
Era la distancia que más me gustaba desde siempre. Vi además que ya había cumplido mis etapas en el 1.500 y el 5.000. También probé el 10.000 y no me gustó nada.
¿Un deseo para 2010?
Salud para mí y para los míos. Es lo más importante.
¿Y para el mundo?
Yo siempre estoy en contra de las guerras y a favor de la solidaridad, sobre todo con la gente más cercana a nosotros.
Después de su carrera deportiva le gustaría...
Quedarme en Palencia a trabajar.
¿En la política?
No me atrae mucho. Pero no lo descartó porque mediante ella se puede ayudar a mucha gente.
Tiene fama de madridista...
Me gusta mucho el fútbol. El Real Madrid es un sentimiento pero también me gusta el juego que hace el Barcelona.
¿Si tuviera un problema a quién le pediría consejo?
A mi madre.
¿Con quién cenaría?
Con mi marido.
Compartiría entrenamiento con...
Mis compañeros.
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